
21 Dic La huida hacia adelante
La huida hacia adelante en psicología es considerada como una forma de evitación de los problemas a los que nos enfrentamos.
No se trata de una cuestión de cobardía, está más relacionado con el modo de resolver los conflictos o las diversas situaciones de la vida.
Aunque a primera vista puede aparecer que la huida hacia adelante es una buena opción, lo cierto es que a la larga puede llevarnos a una situación emocional complicada.
El motivo es que la huida hacia adelante en psicología puede enmascarar algún grado de depresión.
¿Qué es la huida hacia adelante en psicología?
Como hemos manifestado, la huida hacia adelante en psicología es una de las 3 formas básicas con las que podemos afrontar una amenaza o agresión:
- Luchar
- Huir
- Quedarnos inmóviles
La huida hacia adelante consiste en mantener una actitud con la que evadirnos de nuestra vida, evitando reconocer nuestros errores y afrontar situaciones que nos resultan incómodas.
Con esta huida hacia adelante se pretende solucionar los problemas manteniendo la actitud que nos ha llevado a estar en ese “lío”.
Ni que decir tiene, que es una forma de resolución de conflictos que no lleva a ningún sitio puesto que, si no aceptamos nuestros errores, no aprenderemos las consecuencias que generan nuestros actos y volveremos a tropezar con la misma piedra.
Practicando la huida hacia adelante no logramos solucionar los conflictos a no ser que cambiemos de rumbo y nos superemos a nosotros mismos.
Huir hacia adelante no soluciona el problema, solo lo pospone.
Siempre que tengamos ocasión, es importante afrontar las situaciones que nos resultan incómodas y resolver los conflictos que tenemos así evitamos que se enquiste y que sea más difícil solucionarlo.
Solucionar nuestros problemas nos hace ganar autoconfianza y sentirnos mejor con nosotros mismos. Dejamos de lado las suposiciones y los pensamientos para dar valor a los hechos, que es lo que realmente cuenta.
Entonces, ¿es malo huir hacia adelante?
La huida hacia adelante es negativa en tanto que la usemos como un modo de rodear situaciones y evitar las situaciones incómodas.
En ocasiones nos encontramos antes situaciones que no sabemos como gestionar y preferimos dar un poco de tiempo mientras buscamos como afrontar esa situación.
Por tanto, la huida hacia adelante es negativa para nuestro bienestar mental cuando nos sentimos incapaces de afrontar situaciones difíciles y usamos la evitación siempre porque no contamos con herramientas con las que poder resolver situaciones complicadas para nosotros.
Si sientes que te cuesta afrontar situaciones complicadas, en terapia psicológica podemos ayudarte a tomar las riendas de cualquier situación trabajando tu autoconfianza y empoderándote.
No hay comentarios